EL FIN DE UN MITO

Hace ya 35 años que nos abandono el naturalista y gran divulgador Dr Félix Rodriguez de la Fuente  se ha hablado mucho de sus documentales y sus programas, de sus rapaces y lobos, pero lo que a mi me sigue estremeciendo es lo que rodeo a su muerte.

Era un 14 de marzo del año 1980, en Alaska hacía un día precioso de sol y sin nada de aire. Nada hacía presagiar que en aquella zona cerca del estrecho de Bering iba a suceder una catástrofe que marcaría a todo un país.

Era el día de su cumpleaños pero Félix se levantó como siempre, con unas ganas frenéticas de grabar aquella carrera de perros con trineo, la carrera del Iditarod, que en el idioma de la zona quiere decir lugar lejano.

Todo empezó normal, recorrido en trineo para grabar la zona,como siempre Félix ere grande y aquel día dijo una frase que pasará a la historia " QUE LUGAR MÁS HERMOSO PARA MORIR", algo le decía que sería su ultimo viaje. Más tarde despegarían en la avioneta Félix, Teodoro y Alberto Mariano, al poco de despegar la avioneta entró en barrena y cuando el piloto estaba a punto de sacarla de ese picado chocó con un pinar que destruyo todo un equipo de ensueño.

El resto del equipo que iba en otra avioneta bajó al lugar de los hechos y se encontró con la peor escena, algo que no olvidarán en su vida.

A partir de aquí y a lo largo de los años se ha especulado con escenas y situaciones que a cualquiera le ponen la piel de gallina.

Una de ellas es que el día anterior después de la cena se pusieron a cantar y una de las canciones que cantaron decía así: " no te vayas todavía no te vayas por favor, no te vayas todavía que hasta la guitarra mía llora cuando dice adiós".

La segunda fue que Félix dijo: " QUE LUGAR MÁS HERMOSO PARA MORIR"

La tercera fue que cuando fueron a despegar un cuervo cruzó por delante de la avioneta.

Pero no todo se queda aquí, días más tarde la secretaria Ángela Minalla recibió una carpeta de uno de los acompañantes de Félix  que dentro decía " ALGO SE MUERE EN EL ALMA CUANDO UN AMIGO SE VA".

Días más tarde en el entierro de Félix en Poza de la Sal cuando iba todo el mundo al cementerio a despedir a Félix un lobo bajo hasta la carretera se quedó mirando el coche fúnebre y a trote lobero se fue alejando, unos decían que era Félix reencarnado( el siempre decía, que si él se reencarnara lo haría en un lobo), o que el lobo bajaba a despedirse del hombre que le salvo de la extinción.

Y lo que más me pone la piel de gallina es que años antes, cuando Félix estudiaba en el internado, dibujó una escena de un pinar nevado en la Alaska que deseaba visitar y que casualidad que ese dibujo era exacto al lugar donde él y sus amigos perdieron la vida el 14 de marzo de 1980, mismo día de su cumpleaños.

Como los grandes héroes de la mitología Félix fue a morir el día de su cumpleaños.

Día de la tragedia